Descripción
La primera goma maleable al infinito: con su material suave, cerca de la plastilina, esta goma Croc Croc no teme las manipulaciones de los niños. Se amasa, y se separa en pequeños pedazos sin deteriorarse, las piezas se recogen hasta el infinito. Una vez utilizada, estirada y amasada, la goma CROC gana un merecido descanso en su caja de protección hermética, inspirada en la carcasa de un pequeño caracol. Bien protegido en su caparazón, la goma no se ensucia.