Descripción
El camaleón está perfectamente preparado para vivir en los árboles gracias a sus dedos prensibles y su fuerte cola enrollada, que le permiten agarrarse a las ramas sin que lo haga caer el viento. Allí, en el árbol, se camufla adaptando al entorno el color de su piel escamosa. Sin embargo, a veces cambia de color para llamar la atención. ¿Y lo consigue?